lunes, 9 de marzo de 2015

GRECIA, AGAPI MOU. (MI AMOR)


Grecia, la cuna de la civilización occidental ha sido, el 25 de enero, la cuna de la dignidad.
“Todo fluye. Nada permanece”.
(Heráclito, filosofo de la antigua Grecia)





GRECIA, AGAPI MOU. (MI AMOR)
No sólo se ha roto un gobierno corrupto, se ha roto un modelo.
Un modelo al que nadie se había enfrentado por miedo a la asfixia económica.
El modelo del sistema financiero y de la Gran Banca, que se basa en exprimir a la mayoría de la ciudadanía, para enriquecerse unos pocos.
Su sede, en la Unión Europea (U.E) es el Banco Central, dominado por Alemania. Solamente los gobiernos sumisos, se someten a su voluntad a cambio de un permiso para robar también ellos impunemente a sus ciudadanas y ciudadanos.
Una red mafiosa con sello legal (capitalismo de amiguetes).
Este modelo representado por la Troika (Fondo Monetario Internacional, FMI; Banco Central Europeo, BCE; y la Comisión Europea) se jacta de ser inamovible, pero el pueblo griego, desafiando la falsa ley de lo inmutable, rescata a su viejo filosofo Heráclito y se dispone a demostrar que nada es intocable, ni siquiera la Troika.
David se ha plantado ante Goliat, ¿Habrá negociación?.
Mientras tanto Alemania, azuza a sus mayordomos, para vigilar que no se rompa el modelo. Miedo al contagio. Enfurecida, invoca a Júpiter, Dios de los truenos, desatando la caída de las bolsas y la evasión de capitales.
Nos exigen más y más recortes. Es como si las arterias de nuestra sangre, sólo fuera para ellos, conductos para succionar dinero. Dinero de sangre. Vampiros.
La deuda que nos piden pagar, además de ilegitima, es tramposa. Veamos.
Privatizar las ganancias y socializar las perdidas. Es decir, sus excesos se lo pasan a los Estados para que con el dinero de todos les paguemos sus altos sueldos y nivel de vida. ¿Nos suena Bankia?.
La deuda del sufrimiento, de los desahuciados de la vida, ¿qué precio tiene?.
El frio de la gente cotizando en las bolsas de Wall Street y la “Carta Universal de los Derechos Humanos” bajo su culo.

La “teoría de los juegos” de un determinado modelo económico dice que hay dos maneras de matar a un Estado: o con la espada o con la deuda. Olvidó un pequeño detalle: la dignidad y la soberanía de un pueblo, no entran en ningún juego. Por eso el pueblo griego ha dicho ¡Basta!. (¿Cuándo España Sr. Rajoy?).
La participación y la consulta están en la medula central de la Democracia.
Si la Troika quiere gobernar a los griegos, que se presente a las elecciones.
Neim, Neim, Sra Merkel. El derecho a “pernada” de una señora como usted, puede ser muy excitante, pero algo anticuado. Y recuerde, que la “tragedia griega” de hoy puede ser algún día, otra vez, la tragedia alemana.
No hace tanto tiempo, 1953, en el “Tratado de Londres”, se condonó una gran parte de la deuda alemana, tras la aventura de Hitler. La solidaridad debe prevalecer a la codicia. (Seguimos jugando al juego de la Oca).
Las políticas neoliberales que se están aplicando en esta crisis, por la U.E., nos recuerdan las de la “Gran Depresión” de los años 30, gran sufrimiento y desempleo. Propiciaron la llegada de los fascismos de Franco, Hitler y Musollini, desembocando en la segunda guerra mundial.
Parecía que habíamos aprendido, pero no.
Es cierto que hubo unos años de cierta bonanza. La economía Keinesiana propicia que el Estado regule el libre mercado. Se crean los Estados del Bienestar en el centro y el norte de Europa, hasta que llego la Sra. Thacher, “Dama de hierro” y volvió a las políticas conservadoras y neoliberales que continuaron R. Reagan y los Bush.
Mientras tanto la socialdemocracia miraba para otro lado siguiendo la “3ª vía” de A. Guiddens que aplicaría Tony Blair, uno de los mentirosos que provocaron la guerra de Irak.
De aquellos barros vienen estos lodos que nos metieron en la crisis actual.
Para profundizar en sus antecedentes, os recomiendo el libro “Una princesa en Berlín” de Arthur R.G. Solmssen.
La U.E. debería cuidar que Estados Unidos y la OTAN dejen de hurgar en la piel de los Balkanes, de la que Grecia forma parte. El avispero del gas y los nacionalismos ucraniano y ruso pueden provocar un polvorín.
Grecia ha sufrido durante años, un bipartidismo corrupto entre la derecha más rancia y la socialdemocracia del PASOK, turnándose en el poder o en coalición.
Los recortes y las brutales medidas de austeridad que les imponía la Troika, provocaron el triunfo y el apoyo al nuevo gobierno que negándose a más recortes pedía la negociación de la deuda. Ahora pretende ir poniendo en marcha las medidas de choque más urgentes.
El bipartidismo fracasado quiere meternos miedo. O ellos o el caos. El caos ya lo trajeron y que se sepa, Alexis Tsipras está más cerca de Obama que de Lenin.

El ultimo harakiri que les pedía la Troika era vender (privatizar) el Puerto del Pireo, que sería como pisotear la memoria de Grecia, la leyenda de Ulises o la llama de Prometeo.
Por los últimos datos, Grecia ha logrado una prorroga de cuatro meses para iniciar las negociaciones. Es cierto que no es mucho, pero recogiendo las últimas declaraciones del joven Alexis Tsipras: “Hemos ganado una batalla, pero no la guerra”. Aun nos queda lo peor. Personalmente echo en falta la presencia de algunas mujeres en su gobierno.
En España, nuestro país, llegan las convocatorias electorales con vientos de esperanza.
El bipartidismo, aquí también, huele a cadáver. Aparecen caras nuevas como Pablo Iglesias, Alberto Garzón, Tania Sánchez, Luis García Montero y hasta el respetable Ángel Gabilondo, aunque de la vieja hornada.
Aquí en Hervás, hemos querido sumarnos a esta ola de futuro. “Ganemos Hervas” sólo representa una nueva manera de gobernar.
Nuestras armas son: la honestidad, la transparencia y la participación de los ciudadanos y ciudadanas en la gestión de las cosas que nos afectan.
El primer ejemplo es que, por primera vez, en la historia de nuestro pueblo, la ciudadanía ha podido elegir libremente a sus candidatos para el Ayuntamiento. Las urnas, el 24 de mayo darán su veredicto.
Heráclito, viejo amigo y filósofo, seguiremos tus enseñanzas para que estos tiempos sigan fluyendo hacia el futuro. Grecia, Agapi mou.
Gabriel Jiménez.
Hervás, marzo de 2015.